La XXIII Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno celebrada en Panamá durante dos días, concluyó este sábado, 19 de octubre, avalando la realización de reformas a ese sistema de concertación con la finalidad de hacerlo más eficaz de manera que las fortalezas y ventajas con que cuenta la región se potencien y beneficien a todos los países que la integran.

En la jornada de este sábado, se realizaron las sesiones plenarias en las que participaron los jefes de Estado y de Gobierno que asistieron a este cónclave internacional. En su mayoría, en esta sesión, las disertaciones de los estadistas coincidieron en expresar su agradecimiento a la labor que realizó en pro de la comunidad iberoamericana, Enrique Iglesias, Secretario General Iberoamericano, quien este año concluye su gestión al frente de ese organismo. Igualmente, se solidarizaron con la presidenta de Argentina, Cristina Kirchner, quien enfrenta quebrantos de salud.

Tras concluir las sesiones, los presidentes de Panamá, Ricardo Martinelli; del Gobierno Español, Mariano Rajoy; el canciller de México, José Antonio Meade y el  Secretario Iberoamericano Enrique Iglesias, dieron a conocer las conclusiones de la XXIII Cumbre Iberoamericana contenidas en la “Declaración de Panamá”.

El presidente panameño, Ricardo Martinelli, en rueda de prensa, dijo que “Panamá se siente complacida por el éxito de esta cumbre en la cual el país ha sido capital iberoamericana durante este año”.

El Mandatario le deseo éxitos a México en la preparación de la siguiente cumbre y en la alta responsabilidad de seguir implementado el proceso de reformas y de renovación de la comunidad iberoamericana.

Por su parte, el Secretario General Iberoamericano, Enrique Iglesias señaló que la versión XXIII de esta cumbre fue convocada  bajo el gran objetivo de modernizar el proceso de este mecanismo de consulta, lo que a su criterio se ha logrado.

El Secretario Iberoamericano destacó que en el proceso de modernización de este mecanismo de diálogo fue importante la priorización de cuatro aspectos relacionados con la cultura, la cohesión social y el conocimiento de la economía y la innovación.

Igualmente, precisó que otro aspecto relevante que tomará en cuenta esta modernización es la integración de los organismos que forman parte del sistema iberoamericano.

“De ahora en adelante vamos a tratar de trabajar hacia una mayor coordinación y presencia conjunta de estas organizaciones”, recalcó Iglesias.

La Declaración de Panamá señala que los Jefes y Jefas de Estado y de Gobierno participantes en este cónclave “reafirmamos  nuestra voluntad de profundizar la discusión sobre la proyección de la Conferencia Iberoamericana”.

Esta determinación, de acuerdo con los mandatarios, se hará sobre la base de la identidad cultural, como foro de diálogo, concertación política y cooperación, en un marco de una profunda transformación de la economía mundial en la que nuestra comunidad debe jugar un papel relevante ante los nuevos desafíos del crecimiento económico y el desarrollo sostenible, la gobernabilidad, la inclusión social, la justicia y el bienestar general de nuestros pueblos.

Los presidentes que participaron en esta cumbre iberoamericana son: de Costa Rica, Laura Chinchilla; Colombia, Juan Manuel Santos;  España, Mariano Rajoy; El Salvador  Mauricio Funes; de México, Enrique Peña Nieto;  de Honduras, Porfirio Lobo; de Paraguay, Horacio Cartes Jara; de República Dominicana, Danilo Medina; de Portugal, Aníbal Cavaco Silva; el primer ministro de Portugal, Pedro Passo Coelho y el príncipe de Asturias, Felipe de Borbón.