Una reunión interinstitucional preparatoria de la XXIII Cumbre Iberoamericana a celebrarse en esta ciudad el próximo año se realizó este viernes en el Ministerio de Relaciones Exteriores, por instrucciones del Canciller Roberto C. Henríquez, para quien los compromisos internacionales de Panamá “son objeto de nuestra atención y prueba de la vocación panameña hacia el multilateralismo”.

En representación del Jefe de la Diplomacia panameña, presidió la reunión el Director General encargado de Proyectos Especiales y Cooperación Internacional, Manuel Garcés Guillén quien explicó que Panamá forma parte de 13 programas, cuatro iniciativas y seis proyectos que se desarrollan en el marco de la Comunidad Iberoamericana integrada por 22 países con una población de 600 millones de personas.

Estos programas, iniciativas y proyectos que desarrollan áreas como la cultura, lo social, educativa, económica e innovación, constituyen un espacio de gran importancia para el intercambio común de experiencias, gestión del conocimiento, formación y fortalecimiento institucional, explicó Garcés.

En la jornada de trabajo en la cual se abordaron además los distintos puntos focales que maneja la Secretaria General Iberoamericana (SEGIB) como órgano permanente de apoyo institucional y técnico de la Conferencia Iberoamericana, participaron por la SEGIB, la Representante de la Oficina Regional para Centroamérica, Doris Osterlof, Juan Alejandro Kawavata, Asesor en Políticas Públicas y Fortalecimiento Institucional, y el Director Adjunto para Panamá, Darío Chirú.

La representante Osterlof indicó que las Cumbres Iberoamericanas que se realizan anualmente permiten a las naciones avanzar en la cooperación política, económica, social y cultural, impulsar la efectividad, incrementar la participación en los programas y presentar nuevas iniciativas.

La funcionaria recordó que en Panamá como sede de la X Cumbre en el 2000, con el tema central “Unidos por la Niñez y la Adolescencia, Base de la Justicia y la Equidad en el Nuevo Milenio”, los Jefes de Estado y de Gobierno reconocieron la importancia fundamental de los niños, niñas y adolescentes como sujetos de derecho en las sociedades iberoamericanas.

En la reunión participaron representantes de diez instituciones que tienen la responsabilidad de la valorización de la ejecución y desarrollo de los programas y de presentar iniciativas para la Cumbre Iberoamericana del 2013.