En los fundamentos del proyecto de ley que tuvo dictamen de Comisión (y fue sancionado sobre tablas con 59 votos positivos) se explicó que al igual que otras grandes capitales del mundo Buenos Aires posee un abundante y frondoso arbolado que constituye un valioso patrimonio. Y si bien la ciudad no tiene especies arbóreas autóctonas existen varias que son parte de la geografía urbana y de la historia y entre ellas se destacan el jacarandá.
Junto a Ramiro Reino, presidente de la Comuna 2 de Buenos Aires, sembramos un árbol Jacaranda en la entrada de nuestra misión diplomática. Comprometidos con los vecinos de Recoleta al cuidado de los árboles.
Jacarandá es un nombre de origen tupí que significa fragante. Nativo de la base de las yungas o selvas de montaña, en el noroeste de Argentina -Tucumán, Salta, Jujuy-, es uno de los árboles indígenas más bellos de este país.