Hoy se rinde homenaje al ilustre Padre de la Diplomacia panameña, Dr. Ricardo J. Alfaro, y a los profesionales diplomáticos de carrera y relacionistas internacionales, servidores públicos que, en el ejercicio de su labor tanto en el Servicio Exterior como en la Cancillería, se distinguen con vocación y defienden los intereses de Panamá ante el mundo.