La presidencia del Consejo de Seguridad de la ONU anunció que la República de Panamá presidirá el Comité encargado de supervisar la aplicación de la resolución sobre la no proliferación de las armas nucleares, químicas y biológicas, así como de sus sistemas vectores.
El mandato de ese comité establece obligaciones vinculantes para todos los Estados del mundo con el fin de prevenir la proliferación de esas armas de destrucción masiva y crea controles nacionales a través de la asistencia y la cooperación con organizaciones internacionales, regionales y subregionales.
América Latina y el Caribe han destacado por ser una región libre de armas nucleares gracias al Tratado de Tlatelolco y al establecimiento del Organismo para la Proscripción de las Armas Nucleares (OPANAL).
Panamá cuenta con un régimen legal que estableció el Consejo Nacional de Comercio y Transporte Seguro, encargado de aplicar en el país medidas para evitar la proliferación de armas de destrucción masivas mediante el control y la fiscalización de material de uso dual.
Asimismo, durante su membresía en el Consejo de Seguridad de la ONU, Panamá ocupará la vicepresidencia del Grupo de Trabajo sobre los Niños y los Conflictos Armados.
Ese importante órgano subsidiario vela por la aplicación del derecho humanitario para la protección de civiles y grupos vulnerables, particularmente los niños, que son los que más sufren las consecuencias de la guerra o de situaciones de conflicto.
Además, Panamá ocupará el papel de coredactor de las resoluciones sobre Haití en el Consejo de Seguridad de la ONU. Panamá espera impulsar, en ese foro multilateral, propuestas consensuadas que permitan hallar posibles soluciones a los problemas complejos que afronta Haití.
Panamá también tendrá un papel activo en los comités de sanciones contra Corea del Norte y el grupo terrorista Al-Shabaab. La Misión Permanente de Panamá ante la ONU seguirá abordando los temas humanitarios derivados de la guerra en Ucrania y dará prioridad a los temas de clima, paz y seguridad en el mundo.