Con motivo de la celebración del 104 aniversario de la fundación de la República de China (Taiwán), el 10 de octubre, también conocido como “Doble Diez”, el Vicecanciller Luis Miguel Hincapié, presentó, a nombre del Gobierno y del pueblo de la República de Panamá, el más afectuoso saludo al pueblo y Gobierno taiwanés.
El Vicecanciller Hincapié resaltó los fuertes lazos de amistad que unen a los dos países, caracterizados por una camaradería y confianza mutua a lo largo de 93 años. Por otro lado, destacó el importante aporte de la comunidad china al desarrollo de Panamá desde la llegada de los primeros grupos al país en el siglo XIX, formando así un vigoroso segmento de nuestra sociedad y cuya milenaria cultura es parte de la nacionalidad panameña.
Al mencionar los lazos de cooperación entre los dos países, agradeció la ayuda recibida para la rehabilitación del antiguo Colegio Javier y del Palacio Bolívar, los cuales hacen parte del conjunto monumental histórico del Casco Antiguo. De igual manera, destacó la importancia del acuerdo de cooperación técnica que apoya el sector agropecuario y del acuerdo de voluntarios del Fondo de Desarrollo y Cooperación Internacional, mediante el cual el gobierno de China brinda a Panamá, a través de jóvenes voluntarios un invaluable servicio de asistencia técnica básica, y fortalecimiento de capacidades a las instituciones panameñas.
Mientras que, el embajador Diego Chou aprovechó la oportunidad para resaltar el excelente nivel de las relaciones bilaterales, al tiempo que agradeció al pueblo panameño por la fraternidad expresada y mostró satisfacción por haber contribuido con la construcción del Centro Educativo República de China – Taiwán, en Las Garzas de Pacora, el otorgamiento de más de 100 becas a jóvenes panameños, para estudiar licenciaturas, maestrías y doctorados en Taiwán y la colaboración a cinco hospitales del país.
El Vicecanciller presentó su profundo agradecimiento al Embajador Diego Chou, próximo a partir al término de su gestión diplomática en Panamá, por su compromiso y ardua labor al frente de la misión caracterizada por su solidaridad y generosidad. A su vez, congratuló el trabajo realizado por su esposa Celia de Chou junto con las damas diplomáticas y les auguró un buen viaje de regreso a su tierra, deseándoles éxitos en su futuro profesional y personal.