La hermandad y solidaridad entre los pueblos de Panamá y Japón quedaron plasmadas nuevamente este jueves, durante la ceremonia, organizada por el Ministerio de Relaciones Exteriores, en recordación de las víctimas del terremoto y tsunami que hace tres años asoló a esa nación asiática.
En el Parque Japonés, emblemático lugar inaugurado en el 2012, como homenaje de Panamá a la memoria de las víctimas, el jefe de la Diplomacia Panameña, Francisco Álvarez De Soto, puso de relieve la gran disciplina, fortaleza, el admirable espíritu y liderazgo del pueblo japonés como ejemplo para toda la humanidad. Además, destacó las excelentes relaciones de amistad, cooperación y entendimiento entre Japón y Panamá, consolidadas durante la visita oficial que realizó este mes a Tokio donde se entrevistó con el ministro de Relaciones Exteriores Fumio Kishida y altas autoridades de la Agencia Internacional de Cooperación del Japón.
su parte, el embajador designado de Japón en Panamá Hiroake Isobe, agradeció al ministro Álvarez De Soto por la iniciativa de dedicar un parque a la memoria de las miles de víctimas y la solidaridad del pueblo panameño durante el mayor terremoto en la historia del país y del tsunami que provocó en Fukushima el peor accidente nuclear del mundo.
El canciller Álvarez De Soto y el embajador Isobe colocaron sendas ofrendas florales en la placa conmemorativa con la esperanza de que el recuerdo de ese desastre natural perdure, para que las futuras generaciones mantengan el sentido de la prevención y busquen hacer del planeta un lugar más seguro donde vivir. Asistieron a la ceremonia: la secretaria general de la Cancillería, Patricia Arias Cerjack, directores generales, miembros del Cuerpo Diplomático acreditado en Panamá, funcionarios de la Agencia Internacional de Cooperación y de la embajada de Japón