La Cancillería representada por Pablo Garrido, Embajador de Panamá en Portugal, Ana Laura Calderón, Asesora del Despacho de Diplomacia Climática y Océanos, Bolivar Cañizalez, Jefe del Departamento de Medio Ambiente y Cambio Climático participó en la Segunda Conferencia de los Océanos de las Naciones Unidas, celebrada el Lisboa, Portugal del 27 de junio al 1 de julio.
Aprovechando este espacio multilateral, la delegación panameña compartió sus buenas prácticas en la implementación de políticas para la Conservación y Protección de los océanos y el cumplimiento del ODS 14 -Conservar y utilizar en forma sostenible los océanos, los mares y los recursos marinos para el desarrollo sostenible.
Panamá reiteró su compromiso de aumentar del 30%.5 al 40% de la superficie marina protegida en el país antes del 2024 e invitó a todos los Estados participantes a aumentar su ambición en la Protección de Nuestros Océanos.
La delegación panameña además participó en la Conferencia en la Primera Reunión de la Coalición “América por la Protección del Océano”, donde se identificaron oportunidades e iniciativas nacionales y regionales para la creación de Áreas Marinas Protegidas y Otras Medidas Efectivas de Conservación, potenciando y fortaleciendo las ya existentes, como el Corredor Marino del Pacífico Oriental Tropical (CMAR) del cual Panama mantiene la presidencia de la secretaria del CMAR.
Como parte de la misión, la delegación panameña sostuvo encuentros bilaterales para la creación de alianzas estratégicas con otros Estados y organizaciones internacionales para abordar temas como: el manejo conjunto de áreas marinas protegidas, la gobernanza de los recursos fuera de la jurisdicción nacional, la protección de ciertas especies marinas de importancia para nuestro país y encontrar soluciones para frenar las prácticas de pesca ilegal, no declarada y no reglamentada (pesca INDNR).
Panamá resaltó, además, la importancia de proteger desde el 30% del océano mundial a través de una red de áreas marinas altamente protegidas para el año 2030; e instó a la conclusión rápida y exitosa de un nuevo Tratado de Alta Mar que prevé el establecimiento de áreas marinas altamente protegidas en alta mar y fortalece la gestión de las actividades humanas fuera de la jurisdicción nacional.