El Gobierno de la República de Panamá, a través del Ministerio de Relaciones Exteriores, desea manifestar su complacencia por la celebración del Día Internacional de los Derechos Humanos; fecha en que se conmemoran 62 años de la aprobación por la Asamblea General de las Naciones Unidas, de la Declaración Universal de los Derechos Humanos.
El Gobierno de la República de Panamá, por intermedio del Ministerio de Relaciones Exteriores, aprovecha la ocasión para reiterar su firme compromiso con el respeto, defensa y promoción de los derechos humanos, como elementos esenciales para el fortalecimiento, la consolidación y el desarrollo de la democracia, la libertad, justicia y paz en el mundo.
Como prueba de ese compromiso, el Gobierno de la República de Panamá, por intermedio del Ministerio de Relaciones Exteriores, se encuentra impulsando el desarrollo de una agenda humanitaria nacional que incluye (1) la divulgación de jurisprudencia e instrumentos internacionales de derechos humanos relevantes para Panamá a través de la página Web de la Cancillería; (2) el cumplimiento de sentencias pendientes y obligaciones internacionales vinculantes para Panamá; (3) la elaboración y presentación, en consulta con la sociedad civil, de informes pendientes ante instancias internacionales encargadas de supervisar el cumplimiento de obligaciones internacionales del Estado Panameño sobre derechos humanos; (4) la oficialización de una Comisión Interinstitucional encargada de dar seguimiento a las recomendaciones de las referidas instancias internacionales relevantes para Panamá; así como e) la firma y ratificación de importantes instrumentos internacionales en la materia como el Protocolo Opcional de la Convención contra la Tortura y Otras Penas Crueles, Inhumanas o Degradantes, suscrito el pasado 22 de septiembre en la Ciudad de Nueva York, entre otros.
Finalmente, el Gobierno de la República de Panamá, a través del Ministerio de Relaciones Exteriores, formula votos para que, en el marco de los foros multilaterales, los Estados Miembros de la Comunidad Internacional, fomentemos el intercambio de buenas y mejores prácticas, que permitan la adopción de políticas públicas eficaces para garantizar el ejercicio pleno de los derechos humanos y el respeto a la dignidad humana.