El Consejo de la Organización Internacional del Bambú y el Ratán (INBAR), con sede en Beijing, China, eligió hoy a Panamá, por unanimidad, en la vicepresidencia por un período de dos años (2023-2024), informó el embajador de Panamá en el país asiático Leonardo Kam.
“En el ejercicio de este cargo, Panamá se propone desarrollar una relación cercana y estrecha con los países miembros; queremos que ellos sean nuestros guías, que sean nuestros orientadores. Allí está la clave del éxito: la cercanía a los intereses, las necesidades y las visiones de los estados miembros”, dijo el embajador Kam en la reunión del Consejo de Inbar.
Esta elección, resultado de la gestión de la misión diplomática panameña, constituye un reconocimiento a la República de Panamá que desde esta posición impulsará la cooperación Sur-Sur en la promoción de la construcción segura y resistente con bambú, la restauración de tierras degradadas, el desarrollo de capacidades e informar la política verde y los objetivos de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
En torno a la postura del Ministerio de Ambiente, el Director Nacional de Forestal, Víctor Francisco Cadavid, afirmó que (como país), “hemos conseguido un proyecto internacional que abarca cuatro países: Cuba, República Dominicana, Perú Paraguay y Panamá”. Este designio, tiene como fin “la promoción del bambú y talleres-capacitación, enfocados en que los participantes que tengan o deseen industrias (relacionadas a este ámbito), puedan aprender todo lo referente al uso del bambú en diferentes productos”.
Esta elección, resultado de la gestión que llevó a cabo la misión diplomática panameña, “constituye un reconocimiento a la República de Panamá que desde esta posición impulsará la cooperación Sur-Sur en la promoción de la construcción segura y resistente con bambú, la restauración de tierras degradadas, el desarrollo de capacidades e informar la política verde y los objetivos de los Objetivos de Desarrollo Sostenible”.
Cadavid, expresó que, en esta vicepresidencia, “se espera seguir impulsando este rubro como una gran alternativa para los productores en temas del combate al cambio climático, la erosión y sentar las bases para tener un rubro que pueda generar (nuevos) ingresos económicos”, mediante la alternativa de posicionar el bambú como “una gran alternativa (para) construcciones a nivel nacional y mundial”.
Durante la administración del presidente Laurentino Cortizo Cohen, se gestiona el impulso de programas sobre el bambú, a fin de fortalecer su cultura por las múltiples posibilidades que tiene esta planta en la construcción y otros usos en la búsqueda de soluciones innovadoras para la pobreza, la sostenibilidad ambiental y la generación de empleo.
El bambú, también llamado acero vegetal, contribuye a prevenir la erosión y sus bosques ayudan a absorber el CO2 en un 30 %, cuenta con más de mil 600 especies en el mundo. Su mercado global se estima en 60 mil millones de dólares y se considera que existen 30 millones de hectáreas plantadas en el planeta. Su impulso ha contribuido con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) 1, 7, 11, 12, 13, 15 y 17 de las Naciones Unidas.
De este tipo de gramínea, la especie más común en Panamá es la llamada caña de guadua (Guadua angustifolia).
INBAR se fundó en 1997 con la misión de mejorar el bienestar de productores y consumidores del bambú y el ratán conservando el carácter sostenible de esos recursos mediante la consolidación, coordinación y apoyo de la investigación y el desarrollo estratégicos y adaptados a las condiciones específicas. Actualmente, la organización está integrada por 50 Estados miembros y tiene oficinas regionales en Camerún, Ecuador, Etiopía, Ghana e India.