Teniendo como escenario el Palacio Bolivar, el Excelentísimo Señor Presidente de la República de Panamá, José Raúl Mulino Quintero recibió el saludo protocolar del Cuerpo Diplomático acreditado en el país e indicó que Panamá, este mes de noviembre, cumple 121 años de soberanía total, momento propicio –dijo Mulino- para que, “con el mayor respeto transmitan este mensaje: no nos sentimos cómodos y es en una ocasión importante como el mes de nuestra patria salir en defensa de nuestros intereses nacionales como corresponde rechazando semejante injusticia”.

Ante los embajadores y representantes de unas cincuenta naciones, el gobernante destacó que Panamá pone al servicio del mundo un canal interoceánico, un hub logístico y uno de los mejores centros financieros, por lo que aspira que esta nación sea tratada con las mismas reglas en los distintos países, y que no se nos juzgue bajo parámetros de su política interna en contra de nuestra decisión soberana.

“Soy el Presidente para defender los intereses de los panameños… No importan las distancias o los mares que nos dividan, estamos aquí como un socio confiable, somos un país que abre sus brazos a estrechar nuestras relaciones internacionales y la reciprocidad en el mundo”, sostuvo Mulino.

El presidente Mulino, quien estuvo acompañado de su esposa Maricel Cohen de Mulino, del Ministro de Relaciones Exteriores Javier Martínez-Acha Vásquez, del vicecanciller de la República Carlos Ruiz Hernández y del Viceministro de Asuntos Multilaterales y Cooperación Carlos Guevara Mann.

“En un momento crucial donde somos amigos, el mundo necesita cerrar filas, aquellos países que creemos en la paz… Panamá se une a las voces que claman por un encuentro amistoso y el cese de hostilidades como corresponde en abierto respeto a los principios de soberanía de los más altos intereses de la comunidad internacional como es natural”, destacó.

El mandatario Mulino concluyó agradeciendo a los diplomáticos por su presencia en Panamá y expresó los mejores deseos a cada país que representan; igualmente, pidió lleven a sus pueblos el cálido abrazo de esta nación que siempre ha mantenido una alianza bilateral con cada uno de los gobiernos y que festejen las fiestas patrias panameñas.

Entre tanto, el Nuncio Apostólico de Su Santidad, Dagoberto Campos, como Decano del Cuerpo Diplomático, auguró al gobierno y al pueblo panameño que Dios ilumine los caminos para que en cada decisión y en cada acto de servicio público sean guiados por su infinita sabiduría.

“La patria no es sólo un territorio, ni una sangre o un idioma, la patria describe la identidad de una nación y constituye una misión que se van transmitiendo de generación en generación… A través de nuestras relaciones bilaterales y multilaterales deseamos continuar fortaleciendo los lazos de amistad y cooperación y seguir contribuyendo a los esfuerzos que buscan el bienestar de todos los panameños”, manifestó.