La ministra de Relaciones Exteriores Erika Mouynes recibió en la Cancillería al Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, Filippo Grandi, con quien evaluó los desafíos que enfrenta la región producto del alarmante incremento de los flujos migratorios irregulares durante su recorrido intra-continental.
En esa perspectiva, la canciller puntualizó en que “tenemos que internacionalizar el problema”, a fin de generar una solución global a un problema que es global. Apuntó que el único camino para evitar que se agudice la situación de los migrantes irregulares, es abordar el problema de manera proactiva, integral y oportuna.
Coincidió con el ministro de Seguridad, Juan Manuel Pino y la Directora General del Servicio Nacional de Migración, Samira Gozaine en la importancia de la articulación responsable de acciones integrales y colectivas de los países, ya sea de origen, tránsito o destino de migrantes.
El Alto Comisionado agradeció el enfoque humanitario que Panamá mantiene y de lo cual, aseguró, hablará con fuerza.
Participaron la viceministra de Relaciones Dayra Carrizo, la directora de Política Exterior, Isbeth Quiel y la asesora Marta Gordón, la Coordinadora Residente de las Naciones Unidas en Panamá, Christian Munduate, el Director Regional de la Oficina para las Américas Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, José Xavier Samaniego y la Representante Adjunta de la Oficina Multipaís para Belice, Cuba, Panamá, Nicaragua y Sur del Caribe, Renee Cuijpers.