El Gobierno de la República de Panamá condena enérgicamente el presunto ataque con gas venenoso en Siria, que dejó como saldo más de 60 muertos, y centenares de heridos, incluyendo niños.
El uso de armas químicas independientemente de quien las utilice es una clara violación a resoluciones de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), como la Convención sobre la Prohibición de Armas Químicas, y atentan contra la paz y seguridad.
El Gobierno de la República de Panamá rechaza este y todo acto de violencia, y hace un llamado al más estricto cumplimiento de acuerdos internacionales para garantizar la estabilidad y bienestar de la comunidad internacional.