La República de Panamá ha demostrado que la transparencia es una prioridad en la gestión gubernamental, así como la cooperación internacional en materia fiscal, y a día de hoy el país no cuenta con ningún compromiso pendiente en cuanto a estándares internacionales en la materia. Así lo aseguró la Vicepresidenta y Canciller Isabel de Saint Malo del Alvarado, quien además preside la Comisión de Alto Nivel para los Servicios Financieros Internacionales del país (CANSIF).
La Canciller ha compartido que desde que inició el Gobierno del Presidente Juan Carlos Varela, Panamá retomó los pasos para adecuarse a estándares internacionales y, en tiempo record, ha adaptado su marco legal y adoptado compromisos y mecanismos que han merecido el reconocimiento de organizaciones y líderes globales que impulsan esta agenda de cooperación internacional.
Panamá hoy día está lista para que sus pares del Foro Global de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), comprueben por ellos mismos estos avances, y en ese sentido ha enviado ya su aplicación al proceso de revisión abreviada (fast track), que permitirá corregir la calificación recibida recientemente a fin de que sea satisfactoria y Panamá no sea considerado en las listas discriminatorias que tanto el G20 como la Unión Europea emitirán el próximo año.
La Canciller además indicó que Panamá está participando proactivamente de lucha contra la evasión fiscal, y siendo parte de las conversaciones en la materia. En adelante, agregó, la prioridad es la continua y proactiva transformación del país y el fortalecimiento de la plataforma financiera y de servicios internacionales, con el desarrollo de nuevos productos y ventajas competitivas. “Para ello hicimos una renovación de la CANSIF, cuyo plan de acción incorpora además recomendaciones del Comité de Expertos Independientes”, agregó.
La República de Panamá hace hoy un llamado a la comunidad internacional a continuar trabajando con todos los países involucrados, para que estos esfuerzos por la transparencia y cooperación no desincentiven la inversión extranjera de países en desarrollo, que como Panamá, necesitan de este capital para financiar la Agenda2030.