Panameños y costarricenses  se unieron en Paso Canoa en una  gran caminata contra la Trata de Personas, en la que participó la embajadora  en  el vecino país, Elizabeth Serrano de Butler,  delegaciones gubernamentales, escuelas públicas y sociedad civil de ambas naciones que se mantienen vigilantes  ante este delito internacional.

La Comisión Permanente para la Protección y Asistencia a Migrantes en Condición de Vulnerabilidad, integrada por entidades públicas de Panamá y Costa Rica, con el apoyo de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), busca reforzar las actividades de prevención contra este delito de lesa humanidad. El Jefe del Centro Administrativo de la OIM, en Panamá,  entidad propulsora de estas actividades entre países,  Santiago Paz,  aseguró que se busca combatir la Trata de Personas porque es uno de los  talones de Aquiles en la lucha contra el crimen organizado.

La Trata de Personas  se ha convertido en la tercera actividad ilícita a nivel mundial por detrás del comercio de drogas o sustancias ilícitas y el tráfico de armas. En este tema, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) sustenta que  actualmente cerca de dos millones y medio de individuos son víctimas de este crimen en todo el mundo.

En Panamá, la administración del Presidente Juan Carlos Varela Rodríguez, a través de la Comisión Nacional Contra la Trata de Personas, activó un Plan Nacional de cinco ejes primordiales: la sensibilización y concienciación para la prevención; protección y atención a víctimas, persecución del delito, cooperación internacional y seguimiento- monitoreo.

El desfile binacional contra la Trata de Personas concluyó con un evento típico de los países en el cuartel Walter Bonilla del Benemérito Cuerpo de Bomberos en Paso Canoas de lado panameño.