El presidente de la República, Juan Carlos Varela, inauguró junto a directivos de la empresa AES Panamá, la primera planta de generación eléctrica a base de gas natural de Centroamérica, con la que Panamá se posiciona como un hub de distribución de gas natural licuado (GNL) en la región.

Para la construcción de esta planta, ubicada en Isla Telfers de la provincia de Colón, se requirió de una inversión de 1,150 millones de balboas, y con su puesta en marcha se robustece la matriz energética del país con una capacidad instalada de 381 megavatios (MW).

El presidente Varela señaló que “esta obra es otro ejemplo de lo que se puede lograr cuando unimos los esfuerzos del gobierno y la empresa privada”, y es que actualmente AES Panamá es una empresa de capital mixto del cual el Estado panameño cuenta con el 50,5%.

El Mandatario agregó que esta planta forma parte de una visión estratégica de Estado que permitirá ampliar la capacidad de generación eléctrica del país, incorporando generación hídrica, eólica, solar y ahora energía a base de gas natural”.

Además, señaló que “estamos ampliando la matriz energética del país, lo que nos permitirá alcanzar precios justos y razonables por kilovatio a corto plazo, beneficiando a todos los panameños, el comercio y la economía. La seguridad energética de nuestro país y el suministro de energía a mejores precios para la población es una prioridad de mi administración”.

Con la construcción de esta planta se generó, en su fase de mayor actividad, más de 2,500 empleos entre directos e indirectos, de los cuales la mayoría fue ocupada por colonenses y para el periodo de producción se contemplan 200 empleos directos.

El Proyecto AES Colón está conformado por dos etapas, de las cuales la entrega de la planta de GNL es la primera de ellas, y la segunda comprende un tanque de almacenamiento de GNL que actualmente muestra 87% de avance y se espera que entre en operación en el año 2019.

El GNL permite su uso a cualquier escala en diversos sectores como la industria, transporte, generación eléctrica y bunkering. Además, puede ser transportado en contenedores, gaseoductos, buques y camiones, entre otros.

Esta planta es una de las obras más importantes que se han hecho en el sector energético panameño, no solo por la magnitud de la inversión, sino también por el ingreso al mercado de una nueva fuente de energía segura y confiable que reduce el uso de combustibles costosos, la emisión de dióxido de carbono (CO2) y las importaciones derivadas del petróleo.

AES Panamá inició operaciones en el año 1999 y a lo largo de los años esta compañía, que es una subsidiaria de la estadounidense AES, ha invertido en el país aproximadamente 2,600 millones de balboas.