«Trabajar a favor de la juventud menos privilegiada, crear una sociedad más justa y con menos sufrimientos, no es algo que dependa de nuestra nacionalidad, sino de nuestra solidaridad y una muestra de ello es la loable labor que desde 1994 realiza en nuestro país, la Asociación de las Damas Diplomáticas”, así lo afirmó, Penny de Henríquez, Presidenta Honoraria, durante la cena de gala en ocasión del décimo octavo aniversario.
La Presidenta honoraria de las Damas Diplomáticas, agradeció a cada una de las esposas de los miembros del Cuerpo Diplomático acreditado en Panamá por el apoyo brindado durante estos 18 años, a esta asociación y les reiteró que «sin importar que su estadía en este país termine, siempre serán bienvenidas, las puertas de Panamá estarán abiertas para ustedes».
Por su parte, el Ministro de Relaciones Exteriores, Roberto C. Henríquez, quien acompañó a su esposa Penny de Henríquez, manifestó que varios actores juegan un rol importante en la labor social que impulsa el Gobierno Nacional de Ricardo Martinelli Berrocal.
A través de sus múltiples programas sociales y organizaciones de la sociedad civil, incluyendo en este esfuerzo mancomunado a las ilustres Damas Diplomáticas que residen en Panamá de manera temporal y aún así se sienten comprometidas con nuestra sociedad y con nuestra juventud en especial, lo que significa que la conciencia social trasciende fronteras, resaltó el Canciller.
La cena de gala es un evento social que tiene como propósito principal recaudar fondos para obras sociales, que las esposas de los embajadores, acreditados en Panamá, realizan en todo el territorio nacional. Esta asociación realizó su primera Asamblea General el 5 de junio de 1994.
Entre las múltiples tareas que desempeñan las Damas Diplomáticas, se destaca la participación activa dentro del Hogar Malambo, la colaboración con el programa “Vivir con Esperanza” que brinda atención integral en materia de salud a niños, niñas y adolescentes afectados por el VIH/SIDA.
«Con este programa se vigila el tratamiento, nutrición y salud de 45 niños que tienen esta terrible enfermedad, 21 de ellos viven de manera permanente en el Hogar Malambo y 24 que viven con sus familiares. Además, se les garantiza una educación académica acorde a sus intereses», indicó la señora de Henríquez.
Las Damas Diplomáticas, han apoyado a lo largo de los últimos años a varias escuelas ayudando a equipar sus aulas de clases, como es el caso del Instituto Nuestra Señora de Fátima. Además, de ayudar a niños provenientes de hogares disfuncionales a culminar sus estudios y a las madres adolescentes, víctimas de abuso sexual y a la prevención de abuso de niñas de 5 a 12 años.
Participaron de esta actividad benéfica la Presidenta de la Asociación de Damas Diplomáticas de Panamá, Graciela Sartori, la Vicepresidenta Dora de Ruso, la Secretaria General Aniela De Dooner, la Tesorera de la Asociación Norma Calero, los Miembros del Cuerpo Diplomático acreditado en Panamá e invitados especiales.