El Gobierno Nacional expresa su complacencia por la elección unánime de la panameña Elia del Carmen Guerra como presidenta de la 8ª Reunión de los Estados Partes en la Convención sobre la Protección del Patrimonio Cultural Subacuático, cuyo acto de apertura protocolar tuvo lugar en Túnez esta semana, mientras que los trabajos del grupo se desarrollaron a través de las plataformas virtuales, desde la sede de la UNESCO en París. La Embajadora Elia del Carmen Guerra se convierte así en la primera mujer en presidir la reunión de los Estados Partes de esta Convención, adoptada por la Organización en noviembre de 2001.

Esta presidencia es parte de la estrategia de la Cancillería para incrementar la presencia y posicionamiento de representantes panameños en organismos multilaterales, fortaleciendo la participación del país en la toma de decisiones sobre asuntos de repercusión global que inciden en el desarrollo social, económico y cultural de todos los panameños, indicó la ministra de Relaciones Exteriores, Erika Mouynes.

La elección de la Embajadora Guerra es de especial importancia para el país porque otorga visibilidad a los esfuerzos que realiza Panamá en la protección del patrimonio cultural subacuático, tanto el propio, como aquel que forma parte de nuestro pasado en común con otras naciones cuyos buques surcaron nuestras aguas y transitaron nuestras rutas interoceánicas, desde la ruta del Chagres, con el Camino de Cruces, hasta el Canal de Panamá, agregó el punto focal del Ministerio de Cultura ante la Convención, doctora Katti Osorio.

Sobre su nueva responsabilidad, la diplomática panameña destacó el rol que juegan los mares para el desarrollo sostenible nacional, siendo Panamá un istmo casi rodeado de mares y con un canal interoceánico que conecta el comercio mundial.

Con esa perspectiva, consideró que su designación acompaña acertadamente la medida anunciada este Día Mundial de los Océanos por el presidente Laurentino Cortizo Cohen, quien por decreto ejecutivo determinó la ampliación de los límites del Área de Recursos Manejados Cordillera de Coiba (ARMCC) y se alcanza el 30% de protección para las áreas marinas panameñas, meta fijada globalmente para 2030.

Durante la 8ª Reunión de los Estados Partes en la Convención sobre la Protección del Patrimonio Cultural Subacuático, se examinaron las acciones adelantadas para implementar la Convención durante estos dos últimos años, así como las labores del Consejo Consultivo Científico y Técnico de la Convención, integrado por expertos de 14 países, el examen de algunos conceptos utilizados en la Convención y la revisión de los procedimientos de evaluación de las mejores prácticas, así como la colaboración prioritaria que puede realizarse con el Decenio de las Naciones Unidas de las Ciencias Oceánicas para el Desarrollo Sostenible, labores de sensibilización, promoción y divulgación pública de la Convención y la cooperación con partes interesadas, con algunas ONG y las cátedras UNESCO.

Panamá, como Estado Parte de la Convención de la UNESCO de 2001, ganó reconocimiento internacional en el campo de “buenas prácticas” en la protección de su patrimonio cultural subacuático bajo los lineamientos de dicha Convención cuando detuvo el expolio del galeón San José, que naufragó en el archipiélago de Las Perlas en 1634 y es parte del pasado en común con España y Perú, por las rutas comerciales marítimas compartidas durante el antiguo imperio español.

La candidatura de Guerra fue propuesta por Honduras y secundada por México, países que tienen una reconocida trayectoria en protección de sus patrimonios subacuáticos.