El Ministerio de Relaciones Exteriores informa que de los 98 estudiantes que cursaban estudios de Medicina General y otras especialidades en Cuba, ha logrado documentar 46 y brindarle las facilidades para que retornen a Panamá.

De esos 46 estudiantes, a 41 se les entregó boleto aéreo y se les cubrió el costo de la tasa de aeropuerto establecido por las autoridades cubanas. Todos ya regresaron a Panamá. De los cinco restantes, cuatro tienen requisitos pendientes para concluir su programa de estudios y posteriormente obtener su título universitario. Uno que está cumpliendo la rotación exigida en su práctica profesional.

Esos estudiantes serán transportados a Panamá por cuenta del Gobierno Nacional, una vez culminen sus programas de estudio. El trámite establecido por la Cancillería para los graduados es presentarse al consulado de Panamá en La Habana para autenticar su título académico, y coordinar su boleto de regreso y el importe de la tasa aeroportuaria.

El plan original era traer a todos los graduados en un vuelo especial coordinado con la aerolínea COPA –a la que el Ministerio de Relaciones Exteriores pagaría los costos de operación- pero el hecho de que los estudiantes culminaron sus gestiones separadamente imposibilitó esa alternativa y se procedió a comprar a cada sus boletos en forma separada.

El arreglo final fue que la aerolínea, dentro de su programa de responsabilidad social empresarial, dio una tarifa especial de $266.25 por cada boleto, a lo que se sumó $25.00 de la tasa aeroportuaria. El total cubierto hasta ahora por la Cancillería suma $12,066,25. Aquellos graduados que llegaron de algunas provincias fuera de La Habana y los que estudiaron en la capital, fueron atendidos dentro del programa de hospedaje y comida establecido por las autoridades cubanas.

El Ministerio de Relaciones Exteriores estima que 52 estudiantes graduados regresaron al país por su propia cuenta, pues el pasado 15 de agosto se les venció a todos su permiso de permanencia en Cuba. La Cancillería no tiene registro del número de estudiantes panameños que continúan sus programas académicos en Cuba, que deberán culminar el próximo año.